Cosas no importantes a las que hay que darle importancia

Lo sé, sé que no soy nadie sobre este planeta pero... por primera vez en mucho tiempo he sentido que sí. ¿Por qué con tan sólo una mirada de un desconocido pueden surgir tantos pensamientos y sentimientos perdidos? De pronto sin darme cuenta sentí lo que tanto añoraba. Sentí aprecio, sentí deseo, sentí aún más vergüenza y sentí gratos recuerdos que se habían escondido en el trastero de mi cabeza.



Supe que no volvería a ver una mirada así observándome en cada momento; disimulada, dulce, atrevida, dudosa. Por un momento sentí que quería a esa persona sin tan siquiera haberle dirigido ni una palabra. La dejé marchar. Aunque, tal vez el destino...

No hay comentarios:

Publicar un comentario